Cómo mejorar tu fortaleza mental

4 consejos para tener una mentalidad ganadora

En mi experiencia con el deporte, he visto esto demasiadas veces. Deportistas que tienen un gran potencial que demuestran continuamente en entrenamientos, amistosos, etc… es decir, contextos de baja presión. Sin embargo, cuando se trata de rendir en competición, su mentalidad les falla y ese potencial sufre las consecuencias.

La gente ha confiado demasiado en modificar metodologías o entrenadores sin haber encontrado ninguna solución. Este artículo es para esa gente. Para enseñaros que lo que tiene que mejorar es la fortaleza mental del deportista.

Y no, no voy a usar las típicas frases motivacionales de las que tanto se abusa hoy en día por los charlatanes del fitness. Más bien, voy a traducir esas frases en acciones sobre las que realmente podréis trabajar y mejorar. Porque, seamos realistas, ¿cómo sé si realmente estoy mostrando una mentalidad ganadora? Aquí te van unos consejos para lo puedas practicar – del mismo modo que lo harías con tu snatch – para dejar de hundirte bajo presión.

1. No dudes

Más concisa no se puede ser con esta frase. Lo que necesitas, antes de nada, es liberar a tu mente de información poco útil. Si has leído alguno de mis post, ya sabes que la capacidad de la atención es muy limitada. Si la sobrecargamos, nuestro rendimiento desciende. Conseguir esa concentración máxima depende únicamente de dónde pongamos el foco atencional. Usa el diálogo interno para dejarle a tu atención que rinda sin presiones. No atiendas al futuro próximo aunque esté a dos minutos. 

¿Qué movimiento toca ahora? ¿A quién tengo enfrente? Eso es lo que debe ocupar tu atención. Los pensamientos automáticos negativos como “¿Y si fallo en la recepción del jerk? ¿Y si me quemo demasiado rápido?” en la vida te van a hacer falta. EN LA VIDA.

2. Confía en ti mismo

Probablemente te sientas idiota diciendo que confías en ti mismo cuando realmente no lo estás haciendo, pero es importante que lo hagas. Puedes entrenar todo lo que quieras. Sacrificarlo todo y esforzarte al máximo en cada sesión. Pero, ¿sabes qué? Hay otros tanto atletas que entrenan más que tú. Hasta el punto en que están quemados física y mentalmente. Esos atletas nunca ganarán los Games.

En la élite, todos los atletas tienen la capacidad física necesaria para ganar los Games. Va a depender, en última instancia, de las diferencias personales, las que vienen dictadas por la mentalidad. Necesitas saber al 100% que eres capaz de superar obstáculos mejor que cualquier otro. Debes saber, en el fondo, que TÚ eres el que prospera bajo presión. Si hay un evento que favorezca tus virtudes, tienes que ir a por la victoria. Tendrás otros tantos eventos para ser conservador. Identifica las situaciones donde puedes brillar y ve a por todas.

El buen rendimiento es una consecuencia de la autoconfianza, y no al revés. Has tenido éxito en situaciones pasadas; utilízalas para darle un repunte a tu autoestima. Te sorprendería ver cómo se dispara la motivación cuando es dirigida hacia una meta poderosa. Esa es la magia de la competición. Estás tan enfocad@ en ganar que se te olvida lo mucho que te está doliendo todo. Utiliza tu propia autoconfianza como motivador.

mentalidad

3. Exponte al fracaso para endurecer tu mentalidad

En competición no (obvio), pero hazlo a menudo en entrenamientos. Debes encontrar las cosas donde eres menos competente y hacerlas con mucha más frecuencia. No sólo porque esto te dará maestría y conocimiento explícito sobre la técnica, sino porque también aprenderás a afrontar el fracaso. Eso es lo realmente difícil. Volver a subirse a la tabla a pillar una ola cuando las últimas 7 veces te ha tragado y escupido sobre la orilla. Hacer 20 ring muscle-ups seguidas es una nimiedad en comparación. 

Mat Fraser aprendió a esprintar con atletas adolescentes. Le dieron pal pelo. Repetidamente. ¿Qué pasó en los Games de 2016? Que masacró a los demás en el evento de sprint. Pero antes de eso, había tenido que afrontar un fracaso doble en 2015, quedando de los últimos en dos eventos de sprint. Se enfrentó a ese fracaso más aún, siendo ampliamente superado por críos de 14 años. Pero eso le sirvió para reforzar su mentalidad aprendiendo a tolerar su frustración.

La gente que se queda en su zona de confort y evita enfrentarse a la frustración de fallar continuamente, nunca serán lo suficientemente buenos. Ni física ni mentalmente. 

4. Encuentra la estrategia de afrontamiento que mejor te funcione

A lo largo de una competición, te las vas a ver con situaciones inesperadas. Es algo consustancial a las competiciones. Dada la naturaleza impredecible de los Games, puedes cagarla en un evento. Pero tienes que reencontrar un estado mental óptimo para enfrentarte al siguiente. Es decir, necesitas ser eficiente en la transición mental de un evento a otro.

Algunos usan el humor. Otros, buscan el apoyo social de familiares y amigos. A lo mejor, necesitas estar sólo para darte un instante de auto-compasión. Sea lo que sea, hazlo y rápido. Porque si intentas meterlo bajo la alfombra a ver si desaparece por arte de magia, te tengo malas noticias… Sin quererlo, estarás incrementando una carga invisible que no te va a permitir sacar lo mejor de ti. El bagaje emocional pesará demasiado. Esos que dicen “No me sentía bien pero no sé por qué”. Eso es un síntoma claro de un afrontamiento ineficaz. Si experimentas cualquier contratiempo, afróntalo cuanto antes para seguir adelante.